Capítulo 1(Parte 2):

Tardé mucho en subirlo,(no me comáis) ya que no encontraba las ganas para hacerlo y estuve intentando hacer un mapa de Kaslae y de la casa de Aylen, Yunna y Vielme, pero me lié y lo borré muchísimas veces así que lo subiré cuando pueda.
Mil perdones por tardar, pero a partir de ahora subiré los días 7, 18 y 28 seguro... y a lo mejor capítulo extra, si encuentro inspiración ^^.
                                                                               Un saludo, Lyra.







Aylen y yo nos giramos a la vez, aunque yo solo pude mirar de reojo.Vi a Bitha detrás con el dedo en la boca inducando que guardaramos silencio.
-¿¡Bitha!?- dijo Aylen conteniendo su tono de voz.
Lentamente apartó la mano.Nos hizo señas para que la siguiéramos.Nos escondimos detrás de una estantería y observamos como el hombre se acercaba hasta salida deteniéndose en las estanterías para disimular.
-¿Habéis visto lo que ha cogido Humk?-susurró-Llevo varios días viéndole en la biblioteca y el otro día le vi en la zona inexplorada llevándose un libro.Le seguí hasta el lugar donde está ahora y le pregunte si buscaba algo en particular.Me dijo que solo miraba y empezó a hurgar entre los libros.Debió esconder ese libro prohibido allí y ahora ha vuelto ha recuperarlo.
-Si avisamos a las bibliotecarias se lo quitarían ¿no?-pregunté.
-Yunna, ¿Cómo les explicamos que estabamos espiándole? Además, esto es serio.No creo que unas bibliotecarias puedan solucionarlo.Ellas están allí controlando libros normales y libros antiguos cuando se los llevan por error- contestó resaltando la ultima palabra-Pero Humk lo está haciendo adrede.Deberíamos esperar y observarle durante unos días.
-¿No es mejor que alguien más lo sepa? por ejemplo Ludes, el es hechicero después de todo, sabrá más sobre libros mágicos.-dijo Aylen.
-Quizá... pero cuantos más involucremos, más preocupación habrá.Si lo quiere copiar para venderlo o vender el original, deberíamos avisar a Morth, y si quiere intentar jugar a los hechiceros, avisar a Ludes y Frider, el alcalde.Si intenta algo peor... habría que avisar a todo el mundo, pero si solo quiere leerlo, preocuparemos a gente innecesariamente.Pienso que deberíamos observarle y ver que trama.
En ese momento Humk les decía a las bibliotecarias que tenían muchos libros y todos eran inútiles, saliendo con su habitual expresión de mal humor.
Bitha decidió buscar información sobre el libro que Humk se había llevado, y nosotros dos seguimos el consejo que nos dió nuestra amiga después y actuamos como si nada hubiera pasado y seguiríamos así hasta que pasara algo nuevo.
Nos olvidamos de la razón principal por la que fuimos allí(Aylen y yo nos parecíamos tanto que incluso teníamos ambos mala memoria) y fuimos a casa.Nuestra casa estaba en una de las calles principales, la calle Skert, llamada así en honor al primer alcalde del pueblo, Skert Ferisan.Nuestro alcalde era el duodécimo Skert, pues todos los alcaldes eran parientes y todos se llamaban así.
El centro del pueblo era la plaza Hélis, donde cada sábado se montaba un mercadillo.Rara vez venía un extranjero de visita, por no decir que no venían nunca...Tal vez no debería decir que es el centro, pues estaba en un lado, pero era la plaza principal del pueblo.
Caminamos por la calle Flers y giramos a la derecha hasta llegar a la plaza.Nuestra casa era de las principales, asi que estaba en uno de los lados de la plaza.
Nos encontramos a Vielme en el jardín, cuidando, regando las pequeñas flores que aun no habían terminado de crecer.
-Hola pequeños-Nos dijo la Medis con una sonrisa maternal-Habéis llegado justo a tiempo.Acabo de preparar la comida.
-Hola Ma-Respondimos casi a la vez-Vamos al patio y ahora te ayudamos a poner la mesa ¿Vale?-Añadió Aylen antes de agarrarme y llevarme hasta afuera rápidamente.
Abrió la puerta del patio.Nuestra casa era enorme de por sí, sin contar los patios, y en especial el patio de atrás era particularmente grande.Unos cerezos en una esquina desentonaban con el resto.Ese era el sitio favorito de Ma (Como la llamábamos nosotros, en diminutivo de Mamá, porque había llegado a serlo realmente ya que no conocíamos otra, aunque no hubiéramos podido encontrar una mejor).Tenía un estanque rodeado con pequeñas piedras y era de un estilo extranjero llamado estilo oriental, típico en oriente.Tambien tenía una mesa de cristal precioso que parecía tener magia por dentro, puesto que en vez de ser transparente recordaba más al hielo,y a las figuras que tenía éste dentro,que al cristal.Los demás árboles eran de ramas fuertes y hojas de todos los tonos de verde que puedas imaginar.Escondido por un árbol solitario en el final del patio, había un agujero que conducía a una cueva(por llamarlo de algún modo, ya que era diminuta) que conducía al bosque de las afueras de Kaslae, del que (aunque estaba terminantemente prohibido) conocíamos hasta un kilómetro a la redonda.

Los únicos árboles lo suficientemente altos como para hacer una cabaña estaban alejados, donde teíamos la nuestra.Era una cabaña que nos había llevado tres estaciones de esfuerzo y perseverancia, pero el resultado final era algo como para sentirnos orgullosos.Dos plantas, la de abajo con un sofá, una alfombre y una mesa y algunos muebles,la de arriba con dos literas(pues podríamos tener que llevar a alguien allí algún día), un mueble dedicado a ropa, una estantería con algunos libros y un balcón resguardado por un tejado con un puf de camuflaje en el que me encantaba sentarme para leer, sobretodo mientras llovía.Además, escondida en un lateral del balcón, una escalera que conducía a una especie de "tercera planta" donde podías ver las estrellas, pero en la que apenas había un espacio con techo que pudiera considerarse otra planta.En ella teníamos un pequeño sofá de dos personas, una alfombra y una estantería.La cabaña no parece muy grande a simple vista, pero Ma nos enseñó a aprevechar bien el espacio.Todos los muebles eran de madera clara y las literas y los sofas blancos.Las alfombras eran de un color indefinido que quedaba bastante bien.La madera de la cabaña era de nogal envejecido y gracias al barniz tenía un toque rojido.Aunque viniera gente, nuestra cabaña era inaccesible gracias a una barrera de altos arbustos que ocultaban la parte baja del arbol y la cabaña estaba camuflada por ramas excepto por un lado donde tuvimos que poner ramas de otros arboles, pero aun así pasaba desapercibida.Para atravesar los arbustos tenías que tirar de una liana situada en el árbol más cercano que hacía que subiera una zona dejando un hueco por el que podías pasar si te agachabas.No nos aventurábamos nunca más allá de lo que conocíamos, puesto que no necesitábamos conocer más bosque para nada y hay peligros allá afuera.No sabíamos porqué estaba prohibido salir de Kaslae, pero decidimos no investigar más.Aylen me había llevado hasta la cabaña corriendo y me hizo subir hasta arriba del todo, donde teníamos la "tercera planta".
-¡Aylen!-Le grité-¿¡Se puede saber qué pasa!?
Respiró hondo mientras se sentaba en el sofá invitándome con un gesto a que lo imitara.Me senté y le miré con una mueca de fastidio en la cara.
-Cada vez que hablemos sobre lo que voy a hablarte será aquí, en la base, ya que en cualquier otro sitio no estamos tan seguros como aquí ¿Vale?
-Vale ¿Pero de qu...
-¿No crees que Humk planea deshacerse del pueblo?-"Sin rodeos "pensé"típico de él"-Siempre se queja de todos, no es nada nuevo saber que odia al pueblo.
-Lo pensé, pero no podríamos hacer nada.No tenemos pruebas, puede haberse deshecho ya del libro o puede que no lo podamos encontrar para inculparle.
-Sí, pero podemos investigarle hasta que él solo se delate.
-¿Delatarse?Todo el mundo sabe que, aparte de malhumorado es escrupuloso.¿Recuerdas el día que se le cayó una gota de pintura mientras pintaba su casa?La miró con odio-dije recalcando lo de odio-fue dentro con paso acelerado y se cambió la ropa.
Me levanté mientras decía lo último y me puse a curiosear los libros que teníamos en la estantería.
-Ya, pero tendrá un error, y podemos ayudar a que eso ocurra-declaró con una sonrisa pícara.
-¿Ayudar?-Pregunté-¿Qué plan macabro has maquinado ésta vez?-No pude evitar una mueca burlona mientras sonreía.La mayoría de travesuras que hicimos de pequeños las planificaba Aylen, asi que estaba preparada para cualquier idea por extraña que fuera, ya que si era suya, tenía un 83% de probabilidades de funcionar.
-No es macabro.Ni complicado, no esperes mucho.Es simple pero puede funcionar y no se sabrá que es cosa nuestra.
-¿Y bien?
-Pues verás Yunna, el plan es...